En un mundo ideal, las redes sociales formarían comunidades, facilitarían la comunicación de unos con otros y se intercambiaría información de manera efectiva, eficaz y sobre todo veraz; sin embargo, nuestra realidad es otra.
Vivimos una vida de fantasía en las redes sociales.
El 80% de las veces, aparentando felicidad para que los de al lado no se enteren de nuestra realidad.
Vivir en la “era de la información” nos hace ser los más desinformados del universo, inmersas en una ola de información falsa.
Hace ya algunos años, el chismesito de la Lonja normalmente comandado por señores, era lo que regía la información de las familias tehuacaneras y hoy en día lo rigen las redes sociales y el chisme que podamos obtener de ellas.
El de boca en boca se le puso viagra y se potencializó con el uso de diferentes herramientas tecnológicas, donde se pueden acabar honras o subir peldaños en la vida social, por lo que muestras, y no por lo comprobado.
Bien dicen que lo que toca el ser humano lo destruye y lo convierte en un arma para sus intereses y eso pasa con las redes sociales, son un arma de doble filo.
En este punto donde la información fluye a tiempo real, nos hemos convertido en esponjas chupadoras de todo tipo de noticias, notas e indagaciones, todos somos detectives privados desde un celular o computadora y lo más importante opinólogos expertos en cualquier tema de tendencia.
Lastimosamente, no nos damos cuenta de que es el punto de manipulación más grande para los cotos de poder, por donde insertan en nuestras mentes lo que quieren que percibamos.
O ¿a poco creen que la mayoría de las tendencias salen de la nada?, al igual que con los medios tradicionales las redes sociales se manejan por diferentes teorías de comunicación de masas, pero con VIAGRA.
Y es una cosa muy sencilla, ahora las reuniones de chismes se basan en lo que viste en facebook, instagram o en X, aquí voy a dejar de lado tik tok, porque esa plataforma no es una red social, solo es una plataforma de entretenimiento donde las comunidades se sienten identificadas unas con otras y se consumen entre si.
Ya se me pueden decir claro que no, esto no pasa bla bla bla, he escuchado de todo sobre este tema, que mi explicación corta toda libertad que tiene el ser humano de expresarse.
En este punto me cuestiono ¿Cuándo hemos sido completamente libres de pensamiento y expresión, sin que haya un condicionamiento en todo?
Voy a poner un ejemplo muy claro “LOS ELEGIDOS”, dígase de los suspirantes, aspirantes, representantes, coordinadores o como le quieran llamar a este “PROCESO” político-electoral, su construcción de comunicación estuvo basada en medios y redes sociales, ell@s compartían con nosotros su día a día, su paso a paso y nosotros los seguíamos de sol a sombra, sin darnos cuenta que implantaban claros mensajes en nosotros.
Y ojo, no elegimos al candidato, elegimos uno sobre los que ya eligieron los partidos.
La construcción de personajes e ídolos ahora tiene varias herramientas para hacer exponencial su posicionamiento, aunque aquí viene una parte que me encanta explicar y analizar …. LA MANIPULACIÓN de las campañas negras o de la publicidad negra que hace su aparición oficialmente en la Segunda Guerra mundial.
La guerra psicológica es la más abrasiva, y es que pasa algo muy sencillo cuando tú creas miedo o psicosis en una persona, sus decisiones y acciones son tomadas bajo la primicia del MIEDO y el miedo en una persona puede ser el peor en enemigo de la razón, por ahí lo llaman pensar con las viseras.
¡BINGO! A esto se le llama manipulación y en eso se basan las campañas políticas o te manipulan con la bondad, las raíces, historias de vida, la buena ondes, o con la tiranía, la maldad y la perdición…
En sí es la misma gata revolcada, ganan las construcciones, no las propuestas.
Los invito a que estas elecciones realmente razonen su voto, cuestionen y conozcan que actividades se realizan todos y cada uno de los puestos, para no dejarnos deslumbrar por los diputados que prometen construir calles o los presidentes municipales que cambiaran la constitución.
Entre más conocimiento tengamos podremos exigir a quien se corone ganador lo que merecemos.
Recuerden que:
“La cantidad y rapidez de la información, no la hace necesariamente veraz”.
Al Garciamontes.
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