La ola de López Obrador favoreció a Jesús Ramírez Castillo. Su triunfo fue incuestionable. Jesús obtuvo una votación numerosa. Estos fueron los resultados finales:
Jesús Ramírez Castillo (Morena) 3,431 votos
Omar Toledo Balderas (Verde) 1,910 votos
Ernesto Vázquez Arvizu (PAN y Movimiento Ciudadano) 1,910 votos
Israel Espíndola Torres (PRI) 1,575 votos
José Emigdio Reyes Balderas (PSI) 256 votos
Claudia Escamilla Huitrón (PRD y Compromiso PP) 212 votos
Marisela Martínez Ramírez (Panal) 69 votos
Debe destacarse la baja, bajísima votación que obtuvo Claudia del Carmen Escamilla Huitrón, quien presumía que con la estructura del DIF municipal iba a ganar la pasada elección.
Pero en este proceso electoral quedó más que demostrado el repudio, el rechazo del pueblo de Santiago Miahuatlán en contra de Claudia Escamilla y Luis Flores que solo llegaron a 212 votos.
Una muestra enorme del desprecio que le tiene el pueblo a esa pareja.
La historia de la candidatura de Jesús Ramírez Castillo es ampliamente conocida por los miahuatecos.
Una y otra vez Jesús se negó a participar en temas electorales. Siempre dijo que en este proceso electoral de 2018 no iba a contender.
Pero de alguna manera Julio Huerta, el primo de Miguel Barbosa Huerta, lo convenció para que fuera el candidato de la alianza “Juntos Haremos Historia”, bajo las siglas de Morena, Partido del Trabajo (PT) y Partido Encuentro Social (PES).
Montado sobre la ola López Obrador, todo se hizo más fácil para el candidato Jesús Ramírez Castillo.
EL PUEBLO NO PERDONARÁ SI JESÚS RAMÍREZ HACE ARREGLOS BAJO LA MESA CON EL CORRUPTO LUIS FLORES.
En primer lugar debe destacarse que el pueblo miahueteco espera que Jesús no haga arreglos bajo la mesa con el corrupto Luis Flores.
En Santiago Miahuatlán hay una fuerte indignación social por los malos manejos, la suciedad con la que Luis Flores condujo el asunto del nuevo mercado municipal.
Flores entregó fuertes cantidades de dinero por un terreno que no tiene escrituras.
Luego entregó otra suma considerable de dinero por una obra pública que no se ha hecho y que lo más probable es que no se haga.
Las preguntas que el pueblo se hace son las siguientes:
¿Por qué Luis Flores entregó una fuerte suma de dinero por un terreno y por una obra que no se puede concretar?
¿Acaso le dieron un porcentaje por esas cantidades de dinero?
¿Acaso le dieron una mochada?
Debe destacarse que esa obra del nuevo mercado municipal fue una gestión del Senador Miguel Barbosa Huerta.
Pero sospechosa, misteriosamente Barbosa no ha dicho una palabra sobre estos malos manejos.
Luis Flores ha dicho que el dinero será devuelto, pero hasta la fecha ni se ha devuelto, ni se arregla el asunto de las escrituras del terreno; ni se hace la obra.
Todo apunta que Flores le está dando atole con el dedo al pueblo miahuateco.
La comunidad espera que Jesús Ramírez Castillo no haga arreglos bajo la mesa con Luis Flores.
Lo que en realidad se espera es que haga una profunda auditoria, que se investiguen los negocios de Luis Flores y que se revise su patrimonio.
El pueblo miahuateco repudia a Flores y a Claudia Escamilla, y no perdonarán que se haga un arreglo bajo la mesa.
SE ESPERA QUE ROSALÍO RAMÍREZ HAGA UNA BUENA CONDUCCIÓN DE LAS ACCIONES DE JESÚS RAMÍREZ.
En Santiago Miahuatlán se sabe que Jesús Ramírez tiene una estrecha, cercana comunicación con su padre Rosalío Ramírez, quien definitivamente tendrá una fuerte influencia en el próximo Ayuntamiento.
Rosalío Ramírez a su vez es hijo de Marcelino Ramírez, quien en otras épocas fue uno de los más aguerridos críticos de la Iglesia Católica en Santiago Miahuatlán.
Sin embargo ya está visto que Jesús no tiene ese perfil crítico, ni combativo en contra de la fe.
Ya veremos cómo se desarrolla el inicio de la administración de Jesús Ramírez y si en realidad abre una profunda auditoría a la gestión de Luis Flores.
Redacción: Orbe, Bufete de Comunicación.
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