Los agarrones internos en los Ayuntamientos son un tema añejo.
Esta semana la nota la dieron los funcionarios municipales que se dieron un agarrón. Se jalaron los cabellos, se rasguñaron, se tiraron al piso y se rompieron las medias.
Esto no es algo nuevo. Es algo tan añejo como la política local.
En el trienio de René Lezama Aradillas fue célebre el agarrón que se dio con su Regidor de Gobernación Jorge Espinosa Vázquez y que desembocó en una huelga de policías que duró dos días.
En la administración de Felipe Mojarro Arroyo fue legendaria la confrontación con su Síndico Municipal Carlota Carrillo López quien en un informe de gobierno, frente a 2 mil testigos le gritó: “¡No soy palera, ni mi dignidad me lo permite!”
Félix Alejo nunca pudo controlar a su regidor perredista Salvador Rojas Vega, quien en el último informe sostuvo una cartulina con descalificativos contra el edil.
Ahora se da un nuevo enfrentamiento interno.
Pero todo se trata de una venganza política por los resultados del pasado proceso electoral.
FUNCIONARIOS MUNICIPALES SE DAN UN AGARRÓN.
ACUSACIONES MUTUAS SE VENTILAN.
TODO ES UNA CONSECUENCIA DE LA DERROTA DE JESÚS AMADOR HERNÁNDEZ BARBOSA EL LLAMADO “GALLO”.
La polémica ya lleva semanas.
En Sesión de Cabildo la regidora Norma Flores Méndez y el regidor Jesús Hernández Martínez embistieron y señalan a Margarito Andrade Pacheco.
La intención era la de destituirlo de la dirección del Organismo Operador del Servicio de Limpia OOSELITE. Pero Margarito es un hueso duro de roer y no se dejó.
A la semana siguiente los regidores enviaron a funcionarios de la Contraloría Municipal para hacer una auditoría a Margarito, quien reaccionó de forma intempestiva y explosiva: retuvo a los funcionarios, sus trabajadores se fueron a un paro momentáneo de labores. En realidad el paro solo duró unas horas.
Tuvo que intervenir directamente la presidenta municipal Ernestina Fernández Méndez para serenar los ánimos.
Al día siguiente Norma Flores Méndez y Jesús Hernández Martínez dieron una rueda de prensa con señalamientos contra Margarito.
Lo cierto es que el fondo de todo es el siguiente: el Clan Hernández sigue culpando a Margarito de la derrota de Jesús Amador Hernández Barbosa en el pasado proceso electoral.
Sin embargo es una apreciación equivocada. Si hay alguien que se partió el alma en esa campaña fue Andrade Pacheco.
La derrota del llamado “gallo” se debió al desgaste político excesivo que tuvo en los últimos diez años.
Una y otra y otra vez y luego una vez más, buscó la candidatura y en todos esos procesos siempre chocó, se enfrentó, se confrontó con cuadros políticos estatales y locales.
Fue un desgaste enorme.
Ese fue el origen de los resultados electorales.
Los resultados en las urnas no fueron responsabilidad de Margarito, ni tampoco de Valentín Cubillas Romero, a quien en otro momento culparon.
PESE, PESE A TODO LO QUE OCURRE, TEHUACÁN ES UNA ISLA QUE AÚN PERMANECE A SALVO.
¿POR QUÉ RAZÓN NO ENTRAN LOS GRUPOS CRIMINALES QUE OPERAN EN CIUDADES CERCANAS?
¿POR QUÉ?
¿PORQUÉ RAZÓN?
Tehuacán atraviesa por uno de los momentos más difíciles en materia de Seguridad Pública. Robos a casa habitación, asaltos en vía pública, robos de vehículos, crímenes que ocurren a todas horas y en todos los puntos del municipio.
Incluso aún en zonas inhóspitas como la meseta de El Riego ocurren hechos delictivos. Esa zona de la meseta es ocupada por deportistas que utilizan bicicletas que alcanzan precios verdaderamente considerables. El costo de alguna de estas bicicletas va desde los 50 mil hasta los 100 mil pesos.
Obviamente esto despierta la codicia de delincuentes que habitan en esas zonas. En más de una ocasión los ciclistas han sido perseguidos, correteados por los maleantes que hacen todo lo posible por quitarles sus instrumentos deportivos.
En otro rubro el robo de vehículos está disparado. Esta ola de robo de autos comenzó en el trienio de Eliseo Lezama Prieto y hasta el momento no se ha detenido.
Lo curioso de esta actividad delictiva es que se roban vehículos y camionetas compactas de modelos 1980, 1990. Son autos que en el mercado formal alcanzan precios aproximados de 10 mil pesos. Con su factura rigurosa no pasan de 12 mil pesos.
Entonces ¿A cuánto puede ascender su valor en el mercado de mercancías robadas?
A no más de 2 mil pesos. Vendiendo esos vehículos por piezas pueden alcanzar los 3 mil pesos, porque se trata de piezas, de refacciones de modelos 1990 que ya tampoco tienen mercado.
Es menester subrayar que todos esos vehículos robados se quedan en esta misma ciudad. Tanto Seguridad Vial del estado, como la Policía Federal asignada a carreteras jamás ha detenido un solo vehículo robado en Tehuacán.
Esas decenas y decenas de unidades robadas en Tehuacán, no salen a las carreteras. Se quedan en la ciudad y evidentemente aquí mismo son desmanteladas.
Pero pese a toda esta ola delictiva, en Tehuacán todavía se goza de una holgada tranquilidad.
La delincuencia que opera es doméstica, es local. Los asaltantes son ladrones de monederos, de celulares, de mochilas de estudiantes. Hace unas semanas se publicó que un sujeto asaltaba a taxistas con una pistola de diábolos.
Por supuesto toda esta ola de violencia afecta severamente la economía de las familias. Cuando a una ama de casa le roban su monedero o cuando a una obrera de maquiladora le roban todo su salario, esa familia se queda en la indefensión.
La seguridad pública sigue siendo el gran reclamo ciudadano, la asignatura pendiente, el gran compromiso que falta por cumplir.
Claro, si nos comparamos con lo que sucede en las poblaciones que rodean a Tehuacán podemos decir que estamos en la gloria.
En la zona del llamado “Triángulo Rojo” que componen los municipios de: Tepeaca, Palmar de Bravo, Quecholac, Acatzingo, Tecamachalco sigue incontenible la penetración del crimen organizado.
Así: incontenible.
Hace unos días el Procurador de Justicia del estado Víctor Carrancá Bourget fue entrevistado por el programa Punto de Partida de la periodista Denise Maerker. Ahí en esa entrevista el fiscal claramente reconoció que el grupo delictivo que opera el robo de combustible son los Zetas.
Para quienes lean ORBE en nuestra página web
periodicofindesemana.com
les dejamos la liga a esa edición del programa Punto de Partida. Aquí podrán ver y escuchar las directamente las declaraciones del propio Procurador de Justicia de Puebla.
http://noticieros.televisa.com/programas-punto-de-partida/1602/triangulo-rojo/
En Veracruz la violencia también esta fuera de control. Los secuestros, las ejecuciones, la desaparición de jóvenes continúa.
El gobernador de Veracruz Javier Duarte de Ochoa simplemente ya no tiene control de la entidad.
El verdadero gobierno en ese estado es del crimen organizado y son dos cárteles los que se pelean la plaza. Por eso hay tantos jóvenes desaparecidos, porque basta que cualquier soplón o “halcón” (informante), diga: “esos chavos son del cártel contrario”, para que los criminales den la orden de “levantarlos” y desaparecerlos.
No importa si son culpables o inocentes, ellos matan de forma indiscriminada.
En la zona de Teotitlán de Flores Magón, Oaxaca la delincuencia también toma más fuerza. El gobernador Gabino Cué es una de las grandes decepciones nacionales, su gobierno es una gestión débil, inoperante, mediocre.
Y como se ha dicho cuando los gobiernos son débiles, el crimen organizado se vuelve más fuerte.
¿Por qué esos cárteles que operan en Palmar de Bravo, Puebla; en Ciudad Mendoza, Veracruz; en Teotitlán, Oaxaca no entran en Tehuacán?
¿Por qué?
¿Por qué razón no entran en esta ciudad de Tehuacán?
Por una simple y sencilla razón: porque la autoridad municipal no ha vendido la plaza.
Solo por eso.
El día que vendan la plaza van a comenzar las extorsiones reales y verdaderas. No aquellas que piden un depósito de 2 mil pesos en una cuenta de Oxxo.
Las extorsiones reales serán aquellas que pidan 2 mil o 5 mil dólares y quienes no paguen entonces serán ultimados. Esto es lo que sucede en Veracruz, en Acapulco, en Reynosa.
Pero aún no sucede en Tehuacán.
Afortunadamente.
EL PUNTO MÁS DELICADO DE LA DELINCUENCIA ES EL LIBRAMIENTO ENTRE LA CURVA DE LA MEZCALERA Y EL CAMPUS DE LA BUAP.
En los últimos meses y semanas se han reportado decenas de casos de robos y asaltos en el libramiento. Concretamente entre la curva de la mezcalera y el Campus de la BUAP.
También se deben mencionar los robos a casa habitación en los fraccionamientos de esa zona sur de la ciudad.
Los asaltos son principalmente en las colectivas. A la altura de la Avenida de la Juventud se suben dos hampones y a la altura de la Universidad del Valle de Puebla (UVP) o del Campus de la BUAP asaltan a todos los pasajeros y de inmediato se bajan de las colectivas.
Algunas víctimas de estos robos aseguran que es sumamente sospechoso que los delincuentes solo roban a los pasajeros, pero que rara, muy rara vez roban a los choferes. Es decir las cantidades de dinero que llevan los operadores de las colectivas no las tocan.
De acuerdo a los reportes que tenemos en ORBE de fuentes completamente confiables, que viven en la misma zona aseguran que los asaltantes son dos bandas de jóvenes delincuentes que viven en la Junta Auxiliar de San Diego Chalma.
Esos sujetos conocen todas las veredas, los caminos que hay entre esa población y el libramiento.
Atraviesan esas brechas, llegan al libramiento, se suben a las colectivas, las asaltan, se bajan y corren hacia las brechas, las veredas que los llevan a San Diego Chalma y se pierden fácilmente entre los matorrales.
Veinte minutos después cuando llegan las patrullas de la Policía Municipal, esos malandrines ya se están gastando en marihuana o en caguamas el dinero que robaron.
Aquí les dejamos este dato a las autoridades municipales y estatales: las bandas de asaltantes del libramiento, son de San Diego Chalma y se esconden en las brechas de la zona para llegar hasta ese poblado
Ya veremos qué hacen con este dato.
ESCRIBEN SOBRE LA CONSUMADA PERIODISTA APOLONIA AMAYO CID. SIN DUDA LA MÁS GRANDE PERIODISTA DE TEHUACÁN.
Escrito por Claudia Martínez, publicado en el portal Quórum Informativo.
Con respeto y con aprecio reproducimos este texto que se publicó en días pasados sobre la trayectoria de la querida periodista Polita Amayo.
“Para ellas no hay reconocimientos. No hay premios internacionales o nacionales. Llevan la labor del periodismo de forma tan callada como estridente. Sobreviven en esta tan ingrata labor por el amor que le tienen a su oficio; Son las mujeres periodistas que nos marcaron el camino.
El gremio poblano tanto como el sistema, poco las miran; piensan que pudieron haber pasado de moda. Que ya no es su época. Que ya no pueden aportar mucho, pero su tiempo, su experiencia, lo que nos marcaron perdura. Nunca van a dejar de ser las que nos marcaron la brecha del periodismo combativo.
Apolonia Amayo Cid, Polita, es una de esas periodistas de antaño. Inició su labor periodística en Tehuacán. Es una veterana del periodismo. Nadie le dijo que ser mujer y periodista sería una labor ingrata. Ella sigue convencida que esos dos rasgos son los que la hacen sentirse orgullosa.
Todavía recuerda, en esos archivos de la memoria, la primera vez, cuando en 1983 tomó una cámara fotográfica para cubrir la información. Rompió con todo. Se fue tras la noticia y contra la idea de que “la mujer debe estar en su casa”. Eran los tiempos en que los periodistas éramos solo “chismosos” a los ojos de la sociedad.
Se inició cubriendo deportes. Después cubrió de todo: Saltaba de las canchas de béisbol a los eventos sociales. Se hizo indispensable para el periódico El Mundo de Tehuacán y para la agencia Notimex. En aquellos tiempos solo eran tres mujeres las que se daban a la cobertura de la noticia.
A Polita le quedó la responsabilidad de ser la única periodista en un mundo de hombres. Con su cámara fotográfica al cuello tuvo que encarar las burlas y las críticas de los machistas. Hubo solidaridad entre el gremio, pero la sociedad, la señalaba.
Antes no existían ONG’s. No se hablaba de agravios. Pero Polita ya los padecía: En Tehuacán había reticencia a los periodistas. Tras un conflicto electoral, fue secuestrada por los habitantes de Ajalpan. Una masa inconforme de más de 400 personas la obligó a redactar una nota a modo. Firmó un documento de sometimiento. Pero su nota salió publicada al día siguiente en el Sol de Tehuacán.
Su mejor nota fue la cobertura que le dio a los hechos de 19 de noviembre de 1991, cuando el descarrilamiento de un tren provocó la muerte de más de 30 personas. Fue la única que se hizo presente en el lugar de los hechos. Su fotografía y su texto hicieron la nota principal en los medios nacionales. En ella todavía quedan las imágenes de los cuerpos destazados. A la fecha sigue activa, escribe y dirige Contrapeso”.
COLUMNA CÚPULA
BLANCA ALCALÁ LA BOXEADORA EN EL RING DEL 2016.
La semejanza, la comparación es válida.
Es claramente ilustrativa.
Blanca Alcalá Ruíz es como una boxeadora que previamente a la gran pelea de campeonato tuvo que librar otras batallas.
En primer lugar enfrentar un álgido, tortuoso, atormentado proceso interno. Aunque dicha etapa nunca tuvo formalidad estatutaria, fue una temporada de enorme desgaste; la puja contra Enrique Doger Guerrero y Javier López Zavala fue escabrosa.
Aquí en esta Cúpula narramos desde hace un año los ríspidos encuentros entre esos tres agentes.
En concreto describimos una pelea campal que protagonizaron en presencia de Claudia Ruiz Massieu, entonces Secretaria de Turismo. En un encuentro convocado por el gobierno federal, a los “poblanos” (entrecomillas) les tocó sentarse en la mesa de la titular de turismo.
Blanca Alcalá (en realidad tlaxcalteca), Javier López Zavala (chiapaneco) y Enrique Doger (poblanito hasta la médula), no pudieron ocultar sus acres diferencias. Comenzaron las recriminaciones, los señalamientos, los ataques; el escenario era caótico, la babel poblana en toda su expresión.
Ruiz Massieu tuvo que intervenir y conminar a la sensatez, a la prudencia. Solo así los tres enardecidos entraron en cordura. Pero ese agitado encuentro se repitió en diferentes tonos, en distintos lugares.
Los mayores señalamientos y acusaciones contra Blanca Alcalá salieron y todavía en este momento salen de los equipos de Zavala y Doger. Aunque aparentemente el gobierno federal serenó los ánimos con dos delegaciones, el Seguro Social para Enrique y Relaciones Exteriores para Javier, lo cierto es que ambos de ninguna manera han dejado de odiar a la señora Alcalá. Esto hay que subrayarlo, porque va más allá de una natural animadversión política, esto se inscribe en un inocultable odio personal.
Mucho se ha pregonado que en realidad Blanca nunca quiso ser la candidata a la minigubernatura. Pero ella sola se metió en una pelea callejera, en un agarrón de pandilleros.
Pasado ese accidentado proceso interno surge como abanderada, es la formal boxeadora que llevará el logotipo tricolor.
Y cuando va saliendo de los vestidores y se enfila al ring llega la periodista Lydia Cacho Ribeiro y como espontánea le propina severo descontón que la saca de control. La acusación rebota en medios y portales nacionales. Una de las amiga de Cacho, la intelectual Denise Dresser bautiza a la priísta como “la candidata del góber precioso”.
La respuesta es contraproducente. Las “aliadas” de la contendiente acusan que Cacho recibió “millones” por señalar a la priista. Una torpe ayuda que en su momento desatará un efecto boomerang.
Más adelante su discurso crítico sobre el uso del helicóptero se revierte cuando ella misma aparece usando la aeronave de un misterioso patrocinador, cuya identidad hasta el momento se desconoce. Otro severo golpe y todavía no sube al ring.
Visible, inocultablemente atolondrada y confundida sigue caminando rumbo al cuadrilátero. Le da la mano a su otrora aliado antorchista para que la ayude a subir y la respuesta es: “No, ya no estamos con el PRI… haremos nuestro propio partido”.
En la primera plana de “El Universal” el sempiterno líder Aquiles Córdova Morán se deslinda de la abanderada y claramente marca distancia con su proyecto.
Blanca puede olvidarse de los miles de votos de Antorcha Campesina. Es otro golpe a la mandíbula, frente al que los priistas Jorge Estefan, Alejandro Armenta, Juan Carlos Lastiri, Silvia Tanús, Rocío García Olmedo no saben cómo responder. Están igualmente estupefactos, contrariados, confundidos.
Esta es una breve descripción del estado en que se encuentra la candidata, que aún no sube al ring. Todavía no cantan el himno nacional, aun no suena la primera campanada y ya le han propinado una severa tunda desde distintos frentes.
En la otra esquina se encuentra el candidato de la sonrisa de estrella de Hollywood. No parece boxeador, más bien tiene el semblante de un Frank Sinatra, mexicano – libanés. Su bata de seda de pugilista (una bata color azul) luce impecable, no tiene una arruga, ni mancha alguna.
Por supuesto su “manager” el gobernador Rafael Moreno Valle es el que recibe los golpes, uno tras otro, tras otro. Pero eso es parte del acuerdo “Yo recibo los golpes y tu dedícate a lo tuyo”. Por supuesto Gali sonríe radiante.
Señoras y señores, tomen sus asientos. Esto apenas va a comenzar.
Redacción: ORBE, Bufete de Comunicación
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